Mitología fenicia
Baal (también dado como Ba’al) es un dios cananeo-fenicio de la fertilidad y el clima, concretamente de las tormentas de lluvia. Sin embargo, el nombre también se utilizaba como título, ya que significaba “Señor” y se aplicaba a varias deidades diferentes en todo el antiguo Cercano Oriente. En la actualidad, Baal es más conocido por la Biblia como antagonista del culto israelita a Yahvé.
Los relatos relativos a Baal se remontan a mediados del siglo XIV y finales del XIII a.C. en forma escrita, pero se entiende que son mucho más antiguos, conservados por la tradición oral hasta su plasmación por escrito. Las excavaciones realizadas en la antigua ciudad de Ugarit (la actual Ras Shamra, Siria) a partir de 1929 d.C. revelaron miles de tablillas cuneiformes, muchas de las cuales relatan las historias de los dioses y, en concreto, de Baal, que se convirtió en rey de los dioses, sustituyendo a El.
La popularidad de Baal queda atestiguada por las numerosas copias encontradas de las historias que componen el llamado Ciclo de Baal, que relata cómo Baal vence a la muerte y asume la realeza de los dioses. La historia del descenso de Baal al inframundo y su regreso se ha citado a menudo como un ejemplo temprano del motivo del dios que muere y revive, pero esto se ha puesto en duda, ya que Baal no muere ni vuelve a la vida.
Deidades fenicias
estatua votiva infantil de EshmunCada ciudad fenicia tenía su propio conjunto de dioses. Tanit era la diosa principal de Cartago. Era conocida como Astoret en la Biblia y Astarté en Biblos y Sidón. Los fenicios incrustaban una figura parecida a un ankh, llamada Tanit, en el suelo de sus casas para alejar a los espíritus malignos. Baal Hammon era el principal dios fenicio. Otros incluían a la diosa Astarté. Se hacían sacrificios al dios Moloch. Eshmun era el dios de la curación. Muchas personas eran enterradas en tinajas. Con los muertos se enterraban recipientes de comida y bebida, artículos de aseo, cosméticos, lámparas, joyas y objetos rituales.
En Eshmoun (a un kilómetro de Sidón) se encuentra un complejo de templos fenicios dedicados al dios fenicio de la curación Eshmoun, que, según la leyenda, era originalmente un hombre humano que se mutiló y murió en un esfuerzo por escapar de los avances de una diosa, y luego fue devuelto a la vida por la diosa en forma de dios. Se dice que las aguas de las pilas de sacrificio del templo tienen poderes curativos milagrosos.
Dios de Israel
Adonis – Anat – Asherah – Ashima – Athtart/Astarte – Atargatis – Ba’al – Berith – Chemosh – Dagon – Derceto – El – Elyon – Eshmun – Hadad – Kothar-wa-Khasis – Melqart – Moloch – Mot – Qetesh – Resheph – Shahar – Shalim – Shapash – Yahweh – Yam – Yarikh
Abzu/Apsu – Adad – Amurru – An/Anu – Anshar – Ashur – Enki/Ea – Enlil – Ereshkigal – Inanna/Ishtar – Kingu – Kishar – Lahmu & Lahamu – Marduk – Mummu – Nabu – Nammu – Nanna/Sin – Nergal – Ningizzida – Ninhursag – Ninlil – Tiamat – Utu/Shamash
Melqart fue venerado en las culturas fenicia y púnica desde Siria hasta España. La primera aparición del nombre se encuentra en una inscripción de estela del siglo IX a.C. hallada en 1939 al norte de Alepo, en el norte de Siria, la inscripción “Ben-Hadad”, erigida por el hijo del rey de Arma, “para su señor Melqart, al que le hizo un voto y escuchó su voz”[2].
Es probable que Melqart fuera el Ba’al particular que se encuentra en el Tanaj,[3] cuyo culto fue introducido de forma destacada en Israel por el rey Ajab y erradicado en gran medida por el rey Jehú. En 1 Reyes 18.27 es posible que haya una referencia burlona a los legendarios viajes heracleanos realizados por el dios y al egersis (“despertar”) anual del dios:
Arquitectura fenicia
El panorama religioso fenicio no es unitario, sino que se compone de particularismos, y había numerosas diferencias entre las ciudades. El aspecto fragmentario del contexto político fenicio ha influido en el establecimiento de un panteón local en cada ciudad-estado, que organizaba de forma autónoma el ritual público con fiestas y celebraciones. Estos panteones urbanos presentaban algunas características comunes: la organización de las deidades en forma de “tríadas”, lo que no excluía la presencia de otros dioses menos importantes.
El panteón de Goubal (Jbeil/Byblos) estaba dominado por el dios El, dios supremo fenicio asociado a Ra, el dios del faraón, lo que refleja claramente la influencia egipcia. También está la diosa, cuyo culto es muy antiguo, denominada “la Baalat”, la dueña de la ciudad, la “Dama de Biblos”. Su iconografía, caracterizada por símbolos egipcios, la asocia a la Hathor-Isis. Y por último, el dios joven representado por el apuesto Adon (Adonis), dios de la renovación y la regeneración.