Droga Yakoana
Los sanema son una rama de la tribu yanomami que vive en la selva tropical a ambos lados de la frontera entre Venezuela y Brasil. Hasta hace poco, eran cazadores nómadas, pero la caza es ahora tan escasa que muchos se han trasladado a aldeas para llevar un modo de vida más sedentario y cómodo.
Afortunadamente, aún quedan algunos grupos aislados, difíciles de encontrar, que conservan las antiguas tradiciones. Uno de estos grupos confecciona faldas con hojas de plátano para realizar danzas sencillas y repetitivas que se llevan realizando desde hace más de 3.000 años.
Otra tradición secular es la de adornar el cuerpo con plumón ceremonial o fibras de algodón, adornos utilizados en las celebraciones tras la muerte de un familiar, en las que se adquieren mágicamente las cualidades del pariente fallecido al comer sus cenizas.
La danza típica de los yanomami se realiza siempre al atardecer, y su sencilla coreografía se complementa con el carácter alegre de la tribu, a pesar de la amenaza de extinción que comparten con tantos pueblos amazónicos.
Guardián yanomami
En algún lugar del Himalaya me hice amigo de un pastor. Le pregunté por la libertad. Me dijo: “Amigo mío, tus ojos son demasiado débiles. Mira más allá de lo que puedes ver ahora. Verás gente libre. Allí, si ves bien, verás una de mis cabras. Es libre”.
La conversación me vino a la mente mientras leía sobre los yanomami, una tribu que vive cerca de Venezuela. Los yanomami viven en grandes casas comunales circulares, llamadas yanos o shabonos. Algunas pueden albergar hasta 400 personas. La zona central se utiliza para actividades como rituales, fiestas y juegos. Cada familia tiene su propio hogar donde se preparan y cocinan los alimentos durante el día. Por la noche, se cuelgan hamacas cerca del fuego, que se mantiene encendido toda la noche para mantener el calor…
De ellos, entre otras muchas cosas, podemos tomar lecciones de vida democrática y pacífica. Allí no hay lugar para un jefe. Las decisiones se toman por consenso, a menudo tras largos debates en los que todo el mundo opina.
Sí, los hombres cazan, pero hay una regla muy sencilla que tienen en vigor. Ningún cazador se come la carne que ha matado. La reparte entre sus amigos y familiares. A cambio, otro cazador le dará carne. Las mujeres se encargan de los huertos, en los que cultivan unas 60 cosechas que suponen alrededor del 80% de su alimentación. También recogen frutos secos, mariscos y larvas de insectos. La miel silvestre es muy apreciada y los yanomami recogen 15 tipos diferentes.
Tribus amazónicas
SEGURIDADEn nuestros viajes prestamos especial atención a la seguridad. Todos nuestros viajes se basan en la experiencia personal, equipados con el mejor equipo, con proveedores probados y guías locales experimentados que conocen perfectamente las características locales.
EXPERIENCIATenemos una experiencia única en las expediciones y ascensiones más insólitas, un profundo conocimiento de los países y las gentes, y estamos dispuestos a compartirlo contigo. Todas las expediciones y ascensiones son guiadas por el propio Mzungu, garantizando un viaje emocionante y su comodidad.
Vídeo de los yanomami
YanomamiMujer Yanomami y su hijo, junio de 1997Población totalaproximadamente 35.339[1][2]Regiones con poblaciones significativas Venezuela (sureste)16.069 (2009) Brasil (norte)19.420 (2011)LenguasLenguas YanomamiReligiónChamanismo
Yanomami es la autodenominación de los indios… el término se refiere a las comunidades diseminadas al sur del Orinoco, [mientras que] la variante Yanomawi se utiliza para referirse a las comunidades al norte del Orinoco. El término Sanumá corresponde a un dialecto reservado a un subgrupo cultural, muy influenciado por el pueblo vecino Ye’kuana. Otras denominaciones aplicadas a los yanomami son Waika o Waica, Guiaca, Shiriana, Shirishana, Guaharibo o Guajaribo, Yanoama, Ninam y Xamatari o Shamatari[3].
El primer informe sobre los yanomamis para el mundo del Norte es de 1654, cuando una expedición salvadoreña al mando de Apolinar Díez de la Fuente visitó a algunos Ye’kuana que vivían en el río Padamo. Diez escribió:
Por interlocución de un indio Uramanavi, pregunté al jefe Yoni si había navegado por el Orinoco hasta su cabecera; me respondió que sí, y que había ido a hacer la guerra contra los indios Guaharibo [Yanomami], que no eran muy valientes… y que no serán amigos de ningún tipo de indio[4].