Las tradiciones caribeñas
Colorido es una palabra para describir la cultura del pueblo caribeño. Es una mezcla fascinante de influencias arraigadas en su rico patrimonio, moldeadas por su larga historia de colonización, y moldeadas por oleadas de inmigración. La región es un crisol de lenguas, cocina, música y costumbres diferentes. Su cultura es una hermosa mezcla de elementos coloniales y autóctonos moldeados por las experiencias socioculturales de cada país. Es esta diversidad la que da a la región del Caribe una identidad única. He aquí algunas cosas sobre la cultura caribeña que harán que quiera hacer las maletas y volar a las islas para poder experimentarla usted mismo.
La historia del pueblo caribeño no comenzó con la llegada de los europeos. Mucho antes de que los europeos desembarcaran en la región, las islas albergaban una población nativa de unos 750.000 habitantes compuesta por tres grupos: los ciboney o guanahuatebey, los taínos arahuacos y los caribes.
En 1497 Cristóbal Colón fundó una isla en el Caribe, lo que supuso el inicio de la colonización española. El Imperio Español se adjudicó el Caribe y la mayor parte de América Latina. Hacia el siglo XVII, los británicos, franceses y holandeses arrebataron al imperio español los territorios del Caribe. A continuación, Estados Unidos comenzó a colonizar partes del Caribe en la década de 1900. Estos acontecimientos crearon una interesante mezcla entre la cultura nativa del Caribe y la de los diferentes colonizadores.
Religión caribeña
Esta mesa redonda inaugural exploró la provocadora pero fundamental cuestión de cómo el Caribe y su diáspora pueden definirse culturalmente, en términos de aspectos comunes y disyuntivos, y se preguntó si se puede argumentar que existe una esfera cultural caribeña (global) distintiva y funcional.
Ponentes: María Elena Ortiz (conservadora y directora del Instituto del Caribe, Museo de Arte Pérez, Miami, EE.UU.); John Hunte (bailarín-coreógrafo y director artístico de la Compañía de Teatro de Danza de Barbados, Barbados); Edouard Duval-Carrié (artista y conservador, Miami, Haití/EE.UU.); Ariel Camejo (estudioso de la literatura y la cultura, Universidad de La Habana, Cuba); Deborah Hickling-Gordon (estudiosa de las economías creativas y las políticas, Universidad de las Indias Occidentales-Mona, Jamaica).
Comentaristas: Erica M. James (historiadora del arte, comisaria y académica, Universidad de Miami, Bahamas/Estados Unidos); Simone Harris (cimarrona, bailarina-coreógrafa y gestora de artistas, Jamaica); Omari Ra (artista y directora del Departamento de Bellas Artes, Edna Manley College, Jamaica); Courtenay Williams (abogada, coleccionista de arte y mecenas, Trinidad y Tobago); Dionne Walker (cineasta, Reino Unido).
Estilo de vida caribeño
Como conjunto de naciones de colonos, el Caribe contemporáneo ha sido moldeado por olas de migración que se han combinado para formar una mezcla única de costumbres, cocina y tradiciones que han marcado el desarrollo sociocultural de la zona.
La cultura caribeña es el resultado de la historia y la geografía del Caribe. La mayoría de los territorios caribeños fueron habitados y desarrollados antes que las colonias europeas (1492- ) en las Américas, con el resultado de que los temas y símbolos de los pioneros, los agricultores, los comerciantes y los esclavos adquirieron importancia en el desarrollo temprano de la cultura caribeña. Las conquistas británicas en el Caribe en 1759 trajeron consigo una población francófona bajo el dominio británico, lo que exigió un compromiso y una acomodación, mientras que en la década de 1780 la migración de los leales del Imperio Unido desde las Trece Colonias[1].
Aunque no estuvieron exentas de conflictos, las primeras interacciones en el Caribe entre los colonos y las poblaciones indígenas fueron relativamente efímeras, en comparación con la experiencia de los pueblos nativos en (por ejemplo) Estados Unidos o Brasil. En combinación con el desarrollo económico relativamente tardío de muchas regiones, esta difícil historia ha impedido que los pueblos nativos del Caribe tengan una fuerte influencia en las culturas nacionales emergentes, e incluso que destruyan la identidad que les queda[dubious – discuss][2].
Historia del Caribe
A menudo resulta difícil, cuando se habla del Caribe, considerar las especificidades de todas sus “partes”, las diferencias, las desigualdades, entre las islas. Incluso dejando a un lado las diferencias lingüísticas, tenemos que enfrentarnos a las diferentes pautas y normas económicas, políticas e históricas que a veces rigen, y siempre influyen, en el ecosistema artístico y en la fuerza e identidad cultural del Caribe.
La historia nos ha demostrado que el estado político de un país o región desempeña un papel crucial en su salud artística. La producción artística puede florecer o puede estancarse si no cuenta con el apoyo de “los poderes” de turno.
Utilizar el “mundo online” como espacio de almacenamiento -archivando retazos de folclore, instantáneas de acontecimientos culturales- es importante y se adapta perfectamente al medio. Se está convirtiendo en una excelente fuente de conocimiento, accesible y prácticamente infinita. Sin embargo, su aspecto más interesante está en su capacidad para reiniciar el diálogo y el intercambio entre las visiones conceptuales de la cultura y sus realidades cotidianas.