La cultura mesopotámica
Los sumerios y acadios (incluidos asirios y babilonios), originarios de distintas zonas del actual Irak, dominaron Mesopotamia desde el inicio de la historia escrita (c. 3100 a.C.) hasta la caída de Babilonia en el 539 a.C., cuando fue conquistada por el Imperio Aqueménida. Cayó en manos de Alejandro Magno en el 332 a.C. y, tras su muerte, pasó a formar parte del Imperio Seléucida griego. Más tarde, los arameos dominaron gran parte de Mesopotamia (c. 900 a.C. – 270 d.C.)[11][12].
En Mesopotamia se produjeron los primeros desarrollos de la revolución neolítica desde alrededor del 10.000 a.C. Se considera que “inspiró algunos de los avances más importantes de la historia de la humanidad, como la invención de la rueda, la plantación de los primeros cultivos de cereales y el desarrollo de la escritura cursiva, las matemáticas, la astronomía y la agricultura”. Se la conoce como una de las primeras civilizaciones que existieron en el mundo[13].
Hacia el año 150 a.C., Mesopotamia estaba bajo el control del Imperio Parto. Se convirtió en un campo de batalla entre romanos y partos, y las partes occidentales de la región pasaron a estar bajo el control efímero de los romanos. En el año 226 d.C., las regiones orientales de Mesopotamia cayeron en manos de los persas sasánidas. La división de la región entre los imperios romano (bizantino a partir del 395 d.C.) y sasánida duró hasta la conquista musulmana del siglo VII de Persia del Imperio sasánida y la conquista musulmana del Levante de los bizantinos. Entre el siglo I a.C. y el III d.C. existieron varios estados mesopotámicos nativos, principalmente neoasirios y cristianos, como Adiabene, Osroene y Hatra.
La religión mesopotámica
Centrándose en el sur de Mesopotamia y basándose sobre todo en las pruebas del tercer milenio a.C., Potts describe una civilización desde la base. Crea una etnografía de la antigua Mesopotamia que combina el conocimiento de su cultura material y su cultura mental. La creación y el desarrollo de Mesopotamia fueron posibles gracias a los ríos Tigris y Éufrates. “Ninguno de los logros de la producción mesopotámica en el ámbito de la agricultura, la ganadería o las industrias relacionadas (textiles, trabajo del cuero, construcción de barcos)”, dice Potts, “puede entenderse si no es en referencia a los regímenes fluviales muy específicos y a las condiciones del suelo del aluvión”. Potts examina el clima, las formas del terreno y otras condiciones que permitieron poblar la zona. ¿De qué recursos naturales disponían los primeros mesopotámicos? ¿Cómo reflejaban los ideales religiosos mesopotámicos las condiciones básicas de la vida en la llanura aluvial del sur de Mesopotamia? ¿Qué aportaciones a la civilización mesopotámica vinieron de Oriente y cuáles de Occidente? Al abordar estas cuestiones, Potts ofrece una nueva base para comprender una antigua civilización de gran complejidad. – Página web de Cornell University Press. http://www.cornellpress.cornell.edu/book/?GCOI=80140100117280.
Nombres mesopotámicos
La cultura de Mesopotamia se vio muy afectada por el desarrollo de los imperios del país; aunque cada imperio tenía sus propios rasgos y aspectos culturales, algunos rasgos permanecieron constantes en todos ellos. Al observar los rasgos comunes de cada civilización, podemos hacernos una idea de cómo era la cultura mesopotámica.
En todos los imperios mesopotámicos se puede observar que el país se basaba en una cultura marcial. Una cultura marcial es aquella que está orientada a la preparación de la guerra y que otorga privilegios especiales a los guerreros poderosos de la sociedad. La cultura mesopotámica era marcial porque, en aquella época, la paz entre países/reinos era inexistente.
Los imperios de Mesopotamia eran famosos por sus poderosos ejércitos y su agresividad hacia los países y reinos extranjeros. Esto es especialmente cierto en el caso de las civilizaciones asiria y persa, que cultivaban el sentido de la crueldad y la violencia en sus culturas. En las culturas mesopotámicas se enseñaba a los niños a luchar desde pequeños, con la esperanza de que se convirtieran en fuertes guerreros.
Historia de Mesopotamia
La palabra Mesopotamia proviene del griego y significa “tierra entre los ríos”. Los ríos son el Tigris y el Éufrates. Los primeros pobladores de esta región no hablaban griego; sólo miles de años después, Alejandro Magno, rey de Macedonia y de habla griega, conquistó esta tierra y llevó consigo su cultura.
La Baja Mesopotamia se encuentra en el actual país de Irak, mientras que la Alta Mesopotamia está en Siria y Turquía. Mesopotamia se considera la cuna, o el comienzo, de la civilización. Aquí las grandes ciudades bordeaban los ríos y se produjeron muchos avances. A primera vista, Mesopotamia no parece un lugar ideal para que florezca una civilización. Es calurosa y muy seca. En la Baja Mesopotamia llueve muy poco. Sin embargo, la nieve, al derretirse en las montañas en el nacimiento de estos dos ríos, creó una inundación anual. La inundación depositaba cada año el limo, que es un suelo fértil y rico, en las orillas de los ríos. Por eso Mesopotamia forma parte de la media luna fértil, una zona de Oriente Medio rica en suelo fértil y con forma de media luna.