Tradiciones vilanova i la geltru
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Las fiestas locales son uno de los principales atractivos de la localidad para los visitantes. Vilanova cuenta con un calendario festivo tradicional que ha servido de modelo para que muchas otras localidades recuperen sus fiestas y tradiciones más antiguas.
El 17 de enero se celebra la fiesta de los Tres Tombs (conocida como Fiesta de Invierno) en honor a Sant Antoni Abat, patrón de la ciudad. Esta fiesta, que rinde homenaje a los agricultores y a los animales, ha ido creciendo en importancia con el tiempo hasta convertirse en una cita ineludible para los amantes de los caballos.
Las fiestas de Sant Pere son las de la cultura marinera por excelencia. Combinan cultura y tradición, pesca y gastronomía, y actividades lúdicas y de ocio. Destaca el concurso de cremat, un plato típico de marisco similar al suquet de peix. Otro evento importante es la processó marinera, un desfile que acompaña a la imagen del santo desde la iglesia de la Immaculada Concepció, en el barrio pesquero, hasta la playa.
Se trata de la Fiesta de Verano, que se celebra en honor a la patrona de la ciudad, la Mare de Déu de les Neus y que comienza el último fin de semana de julio y finaliza el 6 de agosto. Las calles y plazas de la localidad se llenan de bailes tradicionales, dragones, fuego, castellers, conciertos y actividades para todas las edades.
Camping vilanova i la geltrú
Durante la dictadura, un gran número de personas que huían de la pobreza en el sur de España se instalaron en Vilanova. Los historiadores a veces se refieren a ellos como “fugitivos del fascismo”[6][7] Aunque sufrieron prejuicios, fueron siendo cada vez más aceptados y conocidos como els altres Vilanovins o “los otros Vilanovins”. En 1970, la mayoría de la población de la ciudad había nacido en otros lugares[8]. En la primera década del siglo XXI, hubo otra oleada de inmigrantes (llamados localmente nouvinguts o “recién llegados”), esta vez principalmente del norte de África, Sudamérica y Europa del Este[9].
La agricultura y el comercio marítimo del vino fueron las fuentes tradicionales de ingresos durante los siglos XVIII y XIX. En la actualidad, aunque la agricultura y una importante flota pesquera siguen siendo fuentes de ingresos, la principal actividad económica es la industria en los sectores del metal, el textil y la química[10].
En el Campus Universitario del Centro Interdisciplinar de Referencia del Mediterráneo se ofrecen programas especiales, como cursos de Sociedad, Cultura y Turismo, Medio Ambiente, Sociedad de la Información, Ciencia y Tecnología, y Economía y Empresa.
Playa de vilanova i la geltru
Durante la dictadura, un gran número de personas que huían de la pobreza en el sur de España se instalaron en Vilanova. Los historiadores a veces se refieren a ellos como “fugitivos del fascismo”[6][7] Aunque sufrieron prejuicios, fueron siendo cada vez más aceptados y conocidos como els altres Vilanovins o “los otros Vilanovins”. En 1970, la mayoría de la población de la ciudad había nacido en otros lugares[8]. En la primera década del siglo XXI, hubo otra oleada de inmigrantes (llamados localmente nouvinguts o “recién llegados”), esta vez principalmente del norte de África, Sudamérica y Europa del Este[9].
La agricultura y el comercio marítimo del vino fueron las fuentes tradicionales de ingresos durante los siglos XVIII y XIX. En la actualidad, aunque la agricultura y una importante flota pesquera siguen siendo fuentes de ingresos, la principal actividad económica es la industria en los sectores del metal, el textil y la química[10].
En el Campus Universitario del Centro Interdisciplinar de Referencia del Mediterráneo se ofrecen programas especiales, como cursos de Sociedad, Cultura y Turismo, Medio Ambiente, Sociedad de la Información, Ciencia y Tecnología, y Economía y Empresa.
Vilanova barcelona
Durante la dictadura, un gran número de personas que huían de la pobreza en el sur de España se instalaron en Vilanova. Los historiadores a veces se refieren a ellos como “fugitivos del fascismo”[6][7] Aunque sufrieron prejuicios, fueron siendo cada vez más aceptados y conocidos como els altres Vilanovins o “los otros Vilanovins”. En 1970, la mayoría de la población de la ciudad había nacido en otros lugares[8]. En la primera década del siglo XXI, hubo otra oleada de inmigrantes (llamados localmente nouvinguts o “recién llegados”), esta vez principalmente del norte de África, Sudamérica y Europa del Este[9].
La agricultura y el comercio marítimo del vino fueron las fuentes tradicionales de ingresos durante los siglos XVIII y XIX. En la actualidad, aunque la agricultura y una importante flota pesquera siguen siendo fuentes de ingresos, la principal actividad económica es la industria en los sectores del metal, el textil y la química[10].
En el Campus Universitario del Centro Interdisciplinar de Referencia del Mediterráneo se ofrecen programas especiales, como cursos de Sociedad, Cultura y Turismo, Medio Ambiente, Sociedad de la Información, Ciencia y Tecnología, y Economía y Empresa.