¿Qué inventaron los zapotecas?
Cuando Frida Kahlo se casó con Diego Rivera en 1929, llevaba faldas hasta el suelo y un rebozo con flecos. Más tarde adquiriría una serie de prendas indígenas de varios lugares de México y Guatemala. La afición de Kahlo por la ropa indígena reflejaba su admiración por las tradiciones artesanales y su compromiso con su México natal, donde los estilos distintivos de vestir en Oaxaca y otras regiones están íntimamente ligados a la identidad cultural.
En la mayoría de las comunidades indígenas de México, las habilidades textiles se centran en la creación de prendas de vestir. Los tejedores más hábiles crean telas de gran belleza y complejidad utilizando el telar de cintura nativo. Aunque el aparato es sencillo, sin armazón rígido, es extremadamente versátil. Las prendas tradicionales no se confeccionan a la manera europea, sino que se ensamblan a partir de cuadrados o rectángulos de tela. La textura y el dibujo son fundamentales. El brocado, que a menudo se confunde con el bordado, utiliza hilos de trama suplementarios (los hilos que recorren el ancho del tejido) para adornar las prendas con flores, pájaros, animales y motivos geométricos. El tejido de gasa es otra habilidad antigua: los hilos, cruzados a mano, forman telas de malla abierta con la delicadeza del encaje.
Dónde vivían los zapotecas
Fino huipil zapoteco de dos paneles, todo blanco, con trama calada en diseños geométricos, zoomorfos y antropomorfos. El tercio inferior de los paneles está calado con gasa. Procedente de Santiago Choapan, Oaxaca. Recogido en 1954.
Huipil chinanteco de tres paneles tejido predominantemente en rojo con costuras multicolores extra anchas. Cinta de raso amarilla aplicada en el cuello, sisas y en rectángulo debajo del canesú. El escote también tiene cinta verde y negra y encaje comercial blanco. Ver la página sobre textiles mexicanos para una foto de una mujer de Ojitlán con este huipil. De Ojitlán, Oaxaca. Recogido en 1964.
Huipil chinanteco de tres paneles en rojo y blanco con brocado multicolor. Bordados geométricos y de pájaros a lo largo de los paneles laterales y el central inferior. El escote tiene una cinta negra y amarilla. Ver la página de textiles mexicanos para una foto de una mujer de Ojitlan con este huipil. De Ojitlan en Oaxaca.
Huipil mixteco de tres paneles con bandas brocadas de motivos geométricos, zoomorfos y antropomorfos repetidos en morado, blanco y granate. Brocado realizado con hilo comercial. De Mechoacán, Oaxaca. Recogido en 1968.
Arte zapoteco
Durante la época precolombina, los zapotecos fueron una de las civilizaciones más importantes de Mesoamérica, también conocida como la cultura de Monte Albán; sus inicios fueron en parte influenciados por los olmecas. A través de este artículo, te invitamos a conocer un poco más sobre Los Zapotecas y más.
Una de las civilizaciones más avanzadas de Mesoamérica durante el periodo precolombino fue la cultura zapoteca, aunque su origen aún no está claro, los zapotecas creían que eran descendientes de las nubes, por lo tanto, como hijos directos de los dioses, se autodenominaban el pueblo que vive en las nubes o “binni záa”; apodo que también hacía referencia a su asentamiento en las altas montañas. Esta cultura se desarrolló entre el 500 a.C. y el 800 d.C., dejando constancia de su progreso con gran influencia teotihuacana.
Los primeros zapotecas se asentaron en las regiones montañosas del actual estado mexicano de Oaxaca, y con el tiempo se extendieron a Guerrero, Puebla y el Istmo de Tehuantepec. Estratégicamente, los zapotecas seleccionaron un cerro de territorio prolífico para construir su sede principal: Monte Albán, que por su ubicación a 400 metros sobre el nivel del valle y sus imponentes construcciones, manifestaba su poder. Hacia el año 750 d.C. la cultura zapoteca entró en decadencia con la ocupación mixteca.
¿Qué comían los zapotecas?
El corazón del pueblo zapoteca es el Valle de Oaxaca. Este amplio valle fluvial en forma de Y no es un solo valle, sino un sistema de varios valles que forman el Sistema de Valles Centrales de Oaxaca, un estado del sur de México. En español, estos valles se conocen colectivamente como “los valles centrales”. El sistema de valles está formado por el río Atoyac y sus afluentes, como el río Salado. El sistema de valles centrales está rodeado de montañas boscosas.
La ciudad de Oaxaca de Juárez, un gran y moderno centro comercial y turístico y la capital del Estado de Oaxaca, se encuentra en la confluencia de tres de los valles más pequeños (a veces llamados “brazos”) que conforman el Valle de Oaxaca. Estos tres “brazos” son el Valle de Etla, que se extiende 40 km al norte; el Valle de Tlacolula, que se extiende 50 km al este; y el Valle de Zaachila-Zimatlán-Ocotlán, que se extiende 100 km al sur hasta el Valle de Miahuatlán y abarca el Valle de Ejutla. Monte Albán, la antigua capital del estado zapoteca, ocupa varias colinas que dominan la ciudad moderna de Oaxaca.